Mujeres y su Picasso

Imaginemos una tabla redonda sin caballeros donde seis mujeres nos dicen, a solas, una a una, lo que no dijeron ni a Pablo ni al mundo. "Yo no fui la amante de Picasso; él solo fue mi amo".

Esta confesión de Dora Maar nos da una idea de la influencia de lo sexual en la obra de Picasso, de la sombra proyectada por cada una de las relaciones de nuestro pintor-minotauro en su trayectoria artística.

Se dice que cada mujer de Picasso representa un estilo: desde el cubismo de Fernande o el clasicismo de Olga hasta las metamorfosis que sufrieron sobre el lienzo Marie-Thérèse y la propia Dora. Pero, más allá del papel de simples musas, ¿qué supuso Picasso para esas mujeres y que supusieron esas mujeres para el pintor?

El Empeño Teatro, dirigido por Paz Martínez, presenta ‘Mujeres y su Picasso’, un hondo y complejo retrato del artista compuesto a seis voces donde, por una vez, Pablo Picasso posa para cada una de ellas a través de la memoria de lo vivido, situando al espectador frente a la pregunta inevitable: ¿A dónde habría llegado la obra de Picasso si no se hubiera nutrido de cada una de estas mujeres?